IV - Alas



Alas.
Alas de libertad de pensamientos que surcan la eternidad
y rompen la barrera de la utopía.
Alas de tango, de arrabal y rebeldía,
que nos concede el capricho en esta vida.
Alas de fuego, de pasión secreta que esconde nuestro corazón.
Alas de hierro, fortaleza protectora de tu cría y especie.
Alas guerreras, de ángel furtivo.
Alas que buscan, cielos y horizontes.
Alas sutiles, de frágil mariposa.
Alas de sangre, de revolución consumada.
Alas indómitas, esperanzas infantiles.

Alas son, y somos de ellas, una pluma en esta vida.

III - PESADILLA



«Una bestia nos persigue a través de bosques infinitos,
 la oscuridad que se atraganta con nosotros mientras su gélida risa resuena como eco en mi mente,
las sombras nos ahorcan con nuestras propias manos, inútil es resistirse.
Ojos cocidos por doquier y botones que se desprenden de estos.
Con la misma elegancia, una serpiente vive debajo de nuestra alfombra esperando que busquemos nuestro juguete favorito.
O peor aún, nos damos cuenta que la abuelita no escondía galletas en su alacena...
Las arañas bajan de sus mangas y se cuelan por mi nariz...

Despierto sudando en mitad de la noche... sólo eran sueños malos otra vez...
El circo de locura ha cesado, el cazador está a salvo en su carpa...
Pero aguarda, que son esas manchas de sangre por toda la habitación,
¿quién es ese hombre con cicatrices de estrella?
LA PESADILLA HA COMENZADO.

(y no veo la hora de despertar)»